¿Cuál es mejor?, ¿cuál es más bonita?. 2 Rankings populares PARTE 5

LAS HORROROSAS

Aquí si entramos realmente en la zona totalmente subjetiva donde los parámetros de cada cual pueden ser diferentes y todos respetables, ya que no se basan en datos objetivos como en la clasificación anterior, defendibles considerando unos parámetros objetivos. Para gustos, colores.

No pretendo poseer la verdad universal y mis gustos fijo que no son los mejores. Lo son para mi, y listo. Digo ésto porque por supuesto mi clasificación es tan válida como cualquier otra y sólo pretendo hablar de motos y, en este caso, que nos riamos un rato.

Lo que sí es cierto es que en revistas independientes de todo el mundo las 3 primeras han estado siempre presentes, y la más horrible, la K1, ha sido moto ganadora de múltiples concursos de aberraciones visuales en casi la totalidad de encuestas entre motoristas, diseñadores y periodistas. Y con diferencia.

 

1º- MueBleuWe K1

¡ARGGGGGGGGG!

Además es que va tan mal que ni montado en ella puedes disculparlo. Porque una moto puede ser fea, p.ej. la CBR 600 Benetton de más abajo, pero si cuando ruedas todo va genial, la miras con otros ojos y cambia tu mente. Esta MueBleuWe es una aberración que no se vendió nada ni entre los fanáticos snobs de la marca, y sobre la que me explayé en el capítulo anterior. Dentro de lo que va fatal en la gama del fabricante de esta época, el modelo normal no sólo iba mejor, sino que al menos se puede mirar sin que te quieras arrancar los globos oculares de la cara con tus propias manos.

2º- MuebleuWe R1200ST

¡Duelen los ojos!

Otra aberración estética: parece una moto sacada de una película de serie B de ciencia ficción de los 60, propulsada además con ese motor de 1920 antiguo que le pone el contrasentido a la estética futurista del frontal. Futurista tipo si estabas con un chute de LSD en los 70, claro.

No sé cómo va, pero ni ganas. El motor es el horrible bóxer contra el que te rompes las espinillas y que se va de lado al ralentí, de cambio espantosamente ruidoso y recorrido larguísimo y ese cardán que sigue siendo malo y propenso a bloqueos escalofriantes de rueda trasera y roturas diversas.

Tampoco se vendió nada. O yo no he visto casi ninguna en carretera al menos. Me da lo mismo. Casi mejor no verlas de lo feas que son.

 

3º – Bimota Mantra

Bimota quebró. Principalmente porque una japonesa ya iba como una Bimota a mitad de precio e incluso una GSXR 1100 1993 de serie ya iba mejor que una SB6, p.ej., (y eso que aposta he elegido a una que ya estaba desfasada en su momento como moto deportiva).

Lo siento, hay que ilustrar

Así que los diseñadores e ingenieros enloquecieron buscando algo “diferente”. Y se liaron con el desarrollo nunca acabado del V-Twin de 2 tiempos y con cosas como ésta.

¿A quién le gusta tener una moto que parece una cucaracha?… sí, hay K1s en negro, pero pocas. Los demás, pasamos de los insectos y algunos de ellos dan bastante asco.

Pues esta moto está inspirada en la mantis religiosa. Un bicho nada atractivo ni simpático, por mucho que se coma a otros bichos.

Tengo un amigo, Aurelio, que ha llevado una, y en circuito. Y dice que es una maravilla, pero el problema es que el tren delantero no da “feeling”. Tiene un límite increíble, pero la sensación es que puedes pasar de todo a nada en 1 milésima, y sin saber por qué, te vas al suelo. Aquí queda su testimonio

 

4º.- Cualquier MueBleuWe GS

Realmente de un fabricante que despidió a los ingenieros y diseñadores de la Suzuki Katana se puede esperar cualquier cosa. Está claro que como les salía más barato que contratar diseñadores nuevos, llamaron a un grupo de fontaneros y construyeron estas motos.

Desde el sistema delantero de suspensión inspirado en las estética de los Picapiedra hasta las maletas de lata, pasando por el motor anacrónico a los lados que balancea la moto entera, la moto es terrible. Se ha vendido tanto (¿¿??) que ya nos resulta normal, pero la mezcla de elementos anti-aerodinámicos y antiguos y la talla gigante del bicho la hacen la anti-moto.

Aunque la verdad es que va bien. Pero no me gusta. Llego casi de puntillas al suelo (1.80) y no me da seguridad. El motor es VIEJO, con un cambio ruidoso de recorrido super-largo, y que bebe aceite (la marca pone que un consumo de 1 litro es normal cada 1.000 km. en el Manual de Propietario, así que a los de la secta MueBleuWe que me miran con asco al decir estas cosas les sugiero leerlo. Lo dan con la moto, no lo cobran. En vez de en el colín, como en una moto normal, seguro que está en el neumático o en la culata guardado. Y no, leer hay que hacerlo uno mismo y no lo hace el iPhone, señores MueBleuWeros).

En marcha es verdad que la suspensión te lleva literalmente flotando por el paisaje lunar en el que se están convirtiendo nuestras calles y carreteras, pero me pasa algo parecido a lo que comenta Aurelio respecto a la Mantra: no siento el asfalto que llevo debajo, no sé si agarra o no, no sé si la rueda desliza o puede hacerlo… no me da seguridad. Y los propietarios que andan de verdad con ellas las extirpan el ABS porque es una porquería.

Sí, soy yo y es mi opinión. Y como este es mi blog, escribo lo que quiero. Quien disienta, genial. Que se abra un blog o que se ponga en la nómina de las revistas de la marca alemana. Pero con educación, por favor.

En mi descargo he de decir que he hablado con muchos guardias civiles y te comentan lo mismo: que el sistema de horquilla delantera no da feeling y que las tortas que te das son impresionantes porque vas tan confiado que te olvidas de las leyes de la física.

Y de su fiabilidad, por muchos “rollos” que cuenten sus propietarios, sólo hay que preguntar a los propietarios de las grúas o buscar por internet las marcas que más se averían. Incluso los laboratorios TÜV alemanes destacan su poca fiabilidad, poniendo a la marca compatriota en la cabeza por número de averías respecto a unidades vendidas. Y con una ventaja del triple respecto a la siguiente, HD. Pero al menos ésta no se da “el pisto” con eso de tecnología (mala) alemana.

Como siempre, la realidad es tozuda.

 

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¿Y las motos que faltan? Pues como hicimos ya al principio de esta serie, esta pausa es una manera de expresar la diferencia en grados. Ninguna HD es tan horrible como una GS 1200. Es como Quasimodo al lado de Alien. Quasi llega un momento que no te parece feo porque es majete. El otro es un bicho es que no hay por dónde cogerlo y realmente la mejor solución es el lanzallamas.

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11º- Cualquier HD

¡Hay que probar de todo!

¿A que no se dice nada de cuál era más fea de las 2 hermanas de la Cenicienta? Sólo sabemos que eran despiadadas y horrorosas. Imagino que una lo sería menos que la otra, porque todo en esta vida es relativo, pero en el cuento no se comenta de cuál era la que más se asustaba más así misma al mirarse al espejo.

 

Pues lo mismo con éstas. Desde las turísticas a las de los manillares para los que tienen brazos largos como babuinos, desde las sencillas a los armatostes con ruedas gordas. Para mi son horrorosas todas

¿Cómo se conduce ésto?

No están entre las peores motos que he llevado, es correcto. Y ésta consideración sobre la estética es solo personal. Mi respeto a los que se disfrazan los findes para andar en estos bichos, cada cual hace lo que quiere, pero eso, se disfrazan. ¿Qué es eso de todos en filita detrás de uno y con un chalequito brillantito el último?, los verdaderos harleystas o como se diga, se deben estar revolviendo en sus tumbas.

Porque los genuinos moteros, los que las desmontan, los que las viven, para los que el custom es como dice la palabra, individualidad y libertad, para los que no hay reglas en las salidas en moto, solo viento y carretera… esos están en vías de extinción.

Aunque tengamos una japo. 😉

(Recomiendo la comedia Cerdos Salvajes. Gran película y te partes)

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21º- Cualquier moto Manga/Trasformer naked actual

Seguramente no me gustan porque me vuelvo mayor. Todas me parecen iguales y soy incapaz de distinguirlas si no me fijo mucho. Además, ¿para qué sirve un motor no ya de 150 cv sino de 70 incluso, si para ir a más de 120 debes tener cuello de búfalo?

Todas iguales. A mi me gustaban los robots del Dr. Infierno porque en vez de mejorar lo existente cuando era derrotado por Mazinger, y sacar una versión 2.0 con más plastiquitos y lucecitas y con WiFi, diseñaba robots nuevos de cero, con una creatividad que si en vez de intentar conquistar el mundo se hubiera dedicado a la publicidad, hubiera sido un nuevo Andy Warhol. Mazinger Z era siempre igual. Un poco aburrido, cansaba la vista aunque le incorporasen nuevos gadgets.

Afrodita A era otra cosa, pero por otros motivos 🙂

 

22º- Laverda 1.000 Jota

Otra mítica hoy día. La diferencia con mi Katana es que su chasis y frenos eran bastante mejores, aunque aquí lo que fallaba era todo lo demás: su terminación, componentes eléctricos, motor… Cualquier cosa mecánica susceptible de romper tenías asegurado que lo iba a hacer.

¡Cómo he cambiado! Hoy día no me parece fea. La incluyo porque en su momento era el choteo general con su color naranja bombona butanera y yo la odiaba. Mis conocidos no preguntaban que tal mi moto (siempre en reparación), sino que tal “la bombarda”, la lombarda” o directamente “la bombona”. De hecho, la mandé pintar de negro, como se ve en las fotos. Cuando la tuve no valían nada porque una humilde SR 250 simplemente no se rompía tanto ni daba tantos problemas que te amargaban la vida. Todo un síntoma de las italianas de la época y por qué desaparecieron.

Mi Laverda, ya negra

Las pocas veces que no daba problemas, ¡cómo sonaba el motor con el 3 en 1 que llevaba instalado!. ¡Precioso!. Y no se meneaba ni quería tirarte al suelo como mi posterior Katana y corría un montón (¡la primera vez que vi más de 200 de marcador!). Eso sí, estaba diseñada para gigantes, peso enorme, centro de gravedad alto, embrague para garras de hombres lobo y altura de asiento para el gigante Polifemo, con mi 1.80 llegaba de puntillas al suelo. Todo un contrasentido viniendo su diseño de un país mediterráneo como el nuestro, que no destaca por sus estaturas nórdicas.

Por ende no tenía pata de cabra y cuando bajabas de la moto tenías que apoyártela con cuidado y subir el mamut al caballete. 350 kg más o menos. Se me cayó al suelo más de una vez, con el consiguiente espectáculo y vergüenza en medio de la calle. Y además no podía levantarla y tenía que pedir ayuda.

¿He dicho que LA ODIABA?. Casi me extirpa la afición a ir en moto

No se meneaba porque la suspensión era pétrea. Y se agarraba, frenaba… pero volviendo a la realidad, una de las primeras RD 350 la dejaba clavada en cualquier carretera. Y una XS 400 posiblemente también. Como normalmente estaba rota no tuve mucha oportunidad de encontrarme a ninguna de éstas últimas lado a lado.

Además el servicio oficial en Madrid era entonces de unos viejos siniestros, Corsín, que por falta de piezas hacían reglajes de válvulas “a la piedra”. Esto es, cogían las pastillas de reglaje, unos alicates y las rebajaban así por las buenas en la piedra esmeril, con las consecuencias que se pueden preveer. El desastre que me ocurrió me enseñó que la moto la toco yo y nadie más. ¡Madre mía!.

Corver, el distribuidor, actual de Shoei, hacía lo que podía enfrentado a una fábrica en quiebra como Laverda, eran siempre muy amables y hasta te consolaban cuando les llorabas en el mostrador.

En una de las múltiples roturas me pegué 6 meses aprendiendo mecánica. Monté culata de válvulas grandes de carreras, pistones de alta compresión… ¡una JOTA de verdad!, no la versión 3CL que era la mía y era la que vino a España.

Y luego no pasaba de 120 cuando la acabé. Y después de aprender mecánica por la vía rápida del háztelo tú mismo porque no hay dinero, eres un chaval que está estudiando, y cuando sales por las noches bebes en el baño de la disco agua porque no tienes dinero ni para una Coca Cola ya que inviertes todo en la p*** moto, tuve que aprender el arte de la carburación, que por eso no andaba y te pasaban hasta los autobuses de línea.

Más meses parada, claro, que los repuestos entonces eran imposibles de conseguir.

¡Y qué mala bestia!. Bajos profundos, casi contabas las pistonadas, 220 km/h en un momento, embrague para hombres lobos con garras en vez de manos y ¡qué sonido!. ¡Y frenaba bien!, no como la aterradora Katana que vino después.

Pero no la disfruté mucho. Un día mi Jota decidió que pasaba de que la arreglase más y me escupió una biela por el cárter. Si llego a fumar y llevo un mechero encima la pego fuego. Además lo pensé en ese momento, no es algo que diga ahora, palabra.

 

23º- CBR 600 F Benetton 1.990

Va tan bien que casi no la incluyo, porque se te olvida lo fea que es cuando ruedas con ella. Ahí está nuestra prueba en esta web. Pero desde luego, eso de que un diseñador de ropa se meta en motos es un desastre. Es como ponerle ruedas a un gayumbo de colores.

 

24º- Suzuki GSX 1100 F 1988-1994

Suzuki en su plantilla de diseñadores tuvo contratados a algunos que ahora se dedican a los acuarios o a la pesca submarina, o con fetiche sexual por las aletas, porque les dio por la estética marina, con la RF 900 como máximo exponente de la moda de hacer motos que se parezcan a peces, las GSXF, sobre todo las últimas con esos faros como ojos de besugo o el cachalote de estas líneas.

En azul casi sale en National Geographic en su documental sobre migraciones de ballenas. Y en rojo parece una variedad de tomate llamada San Marzano. Hay otros colores disponibles en versiones desde 1.992 que hacen la moto menos cetáceo, pero las primeras es que son verdaderamente horribles.

No, no es una concentración de GSXFs rojas sin ruedas

Nos gusta mucho en marcha, sobre todo el super-motor que se aloja en su interior, no tiene nada que ver con la estética, y así está escrito en nuestra prueba. Pero el diseño es feo feo.

La suerte es que es una gran moto para todo, y quien pasa de modas se puede comprar un aparatazo irrompible por casi nada. Como sus hermanas más pequeñas. Así que si pasas de modas, que muchos ya hemos aprendido que son una memez y una esclavitud absurda, son grandes motos.

 

25º- Honda CBR 1000 F 1987-1988

Estética redondeada que se ha quedado antigua, pero además en este caso escasa de llantas ya en su día, con unas medidas de gomas que no soportaban ni el peso ni la potencia de la moto, y con un carenado que para una moto sport-turismo no cubre nada.

Como moto baratísima que hace de todo para alguien que no corra mucho y que no le importen las modas pues es perfecta. Pero fea es. Así que debe comprarse muy my barata, porque simplemente la CBR 1000 del año siguiente, 1.989, es enormemente superior. Ésta no es como la anterior, una buena moto. Por muy poco, llantas básicamente, pero no lo es.

7 comentarios on “¿Cuál es mejor?, ¿cuál es más bonita?. 2 Rankings populares PARTE 5”

  1. Livingstone Responder

    Cuando bajaron la K-1 de unos 2.000.000 a unos 1.600.000 pelas, estuve barajando comprármela. ¡Menos mal que no lo hice! Además de fea, no vale para lo que yo la habría usado. Sí, de acuerdo, que con ilusión y afición todas valen, pero ni sirve como rutera, por incómoda y dificultad de llevar equipaje si llevas pasajero, ni como deportiva.

    Me parece increíble que algunos la tengan en el olimpo, como una moto mítica y aún encima, la ven botita!!!

    Me encanta cómo desmitificáis cosas como las Laverda o el Telelever. Al pan, pan….

    La GSX 1100 F sí me gusta estéticamente,

    • TeamMarmota Responder

      La bajaron porque no la vendían, claro, como decimos en el artículo. Y sí, es increíble como ese “zepo” horroroso se cotiza.
      Los mitos, pues eso, mitos son. No es criticar por deporte. La suspensión de la Omega bien que me gustó. Es dar datos objetivos para que la gente esté avisada y les sean útiles. Que luego prueban y no están de acuerdo, genial. Pero al menos alguien les dió un punto de vista diferente al “todo lo nuevo mejor”, o al “todo va genial porque la marca lo dice”.
      Además, el ser humano construye su propia realidad, y hay que darse cuenta de ésto. Las sensaciones que tuve al probar mi primera moto grande, una KZ 400, pues como que prefiero no volver a probar otra para no destruirlas por la cruda realidad del presente, jajaja

      Y como decimos en su prueba, la GSX 1100 F es ballenata y fea… pero va tan bien que da igual y me parece hasta bonita también

      Saludos y gracias

  2. Carlos Responder

    Jajaja… La verdad es que me he reído bastante con este artículo. Se nota que a las BMW las tienes entre las cejas. Mira que yo antes pensaba que eran motos superfiables y con el paso del tiempo, por lo que voy leyendo por internet y hablando con gente, resulta que tienen mantenimientos caros y averías costosas. Si tengo oído que las K100 y K75 sin son duras. De echo se ven un montón circulando y en buen estado. No se como irán… A mi la Gs 1100, creo que es la que pusiste la foto, de faro cuadrado si me gusta. Las otras que parecen camiones más actuales (Gs1200 doble faro) pues no la verdad. La Laverda en negro me parece guapísima, ahora si daba tantos problemas entiendo tu quemazo jajaja. Comparto tu opinión sobre las manga/transformer…yo las pondría en el n°1. Me pasa como con los scooter, no puedo con ellos. Serán muy cómodos para ciudad, pero me resultan horribles. Está claro que para gustos colores. En otro artículo posterior pones a la Katana como la más bella, cuando a mi me parece horrible. A las rf como engendros cuando yo las encuentro con un diseño muy chulo (una pena que no lleven dos silenciosos)…jajaja en fin lo dicho, para gustos… El caso es que es un placer seguir leyendo vuestros capítulos con los que aprendo un montón. Muchísimas gracias un saludo y feliz 2018!!!
    P.D: Espero con interés los artículos a cerca de las gsxf 750 de los 90 y de la Yamaha xj 600.. y cualquier otro que se publique, por supuesto.

  3. Luis Responder

    Como moto fea fea, la Munch, que era un engendro con motor de coche, creo que un NSU pequeño, si la buscaís en internet ya me decis,
    Había en mi barrio alguien que debía trabajar en Holanda y en verano, de vez en cuando aparecian aparcadas motos extraterrestres para nosotros, Kawasakis, Yamahas, cuando lo mas a lo que podías aspirar era a una Puch minicross.
    Aquella Munch era inmensa, rara y fea de narices.
    Años después, apareció con una Laverda Rgs con aquellla pintura en rojo que rezumaba calidad, como la que has puesto en una foto en otro apartado y aquello si que llamaba la atención, antes y ahora.

    • TeamMarmota Responder

      Sí, totalmente. La Múnch es muy alemana. Pero si metía en los artículos motos raras o de series limitadas, pues en las más bellas meto 10 de Sanctuary y se acabó el artículo, jajaj
      Saludos

  4. Xavi Responder

    Tu comentario siguiente me saltó a la vista.

    “¿He dicho que LA ODIABA?. Casi me extirpa la afición a ir en moto.”

    Qué coincidencia! Tuve el mismo pensamiento con mi humilde Laverda (Lamerda) 125 DB One tras 3 nuevas cajas de cambios y 5 pistones con cilindros cambiados en apenas 15000 km. Era un dos tiempos con refrigeración líquida a sifón y al pasar de 100 kmh, pues petaba el motor. A veces salía la bugía disparada y vete a encontrarla la primera vez, después tenía de recambio. El freno de disco delantero frenaba muy bién en seco y nada de nada con lluvia. Peligroso. La primera vez que me pasó casi me mato, justo pude salir al campo clavando detrás para reducir velocidad y así no estrellarme contra un camión a unos 80 kmh.
    Después de probar una preciosa pero de conducción y posición horrible Laverda SFC 1000 de color rojo, cambié a una incómoda pero veloz FZ 750 negra/roja en 1986 y sigo en moto actualmente con una cómoda y veloz FJ 1200 con ABS. Gracias a la japonesas se salvó mi afición. Las japonesas bién mantenidas te llevan al fìn del mundo sin o casi sin roturas. En 32 años con ellas tuve sólo una junta de culata que me paró un viaje y un alternador defectuoso que me vació la batería ya casi de nuevo en casa. A cambio mis BMW, Laverda, Gilera, Benelli y Ducati se rompían como si estuviesen programadas para tener averías. Tardé un rato en aceptar que no encontraría ninguna moto no japonesa que fuese fiable, pues es como es.
    Aún así tuve una moto fiable europea y esta fué mi primera motito, una diminuta pero monísima Montesa Cota 25 en el 74.
    La Cota nunca rompió y mira que no sabía ir en moto ni conocía el significado de mantenimiento, era un crío. La de veces que me fuí al suelo tratando de hacer trial, wheeles o saltando con ella simulando lo visto en la tele. Y nunca me hice daño. Chancletas, camiseta y pantalones cortos era mi equipo de seguridad. Mi ángel de la guardia hacía horas extras, hehe. La de cosas que probaba que no le permitiría jamás a mi hijo. Papá es injusto, hehe.

    Disfruto vuestros artículos a lo grande y me veo recordando mis experiencias con algunas de las mencionadas y, curiosamente, mis experiencias se acercan mucho a lo descrito. De vez en cuando vuelvo con la esperanza de ver algo nuevo para leer.
    Las Katanas, que no me gustan nada, nunca iban rápidas en los 80. ahora comprendo la razón, hehe.
    Diseño por diseño me entusiasma la Ducati 900 SS de los 70, la forma de tiburón de las FJs pero nada de los transformers que se venden hoy en día. La nueva Kawa 900 Z neoretro esa sí me gusta pero yo le añadiría una cúpula al estilo Ducati 900 SS. A ver si esta moto es conducible. O la probais vosotros o tendré que hacerlo yo para saber, hehe.
    Saludos
    Javi

  5. TeamMarmota Responder

    Gracias por tu comentario, Javier

    Si puedo y me la dejan me subiré en una, seguro. A mi en cambio no me gusta su estética. Sólo mira lo que hace Sanctuary con una Z900. ¿No pueden hacer algo parecido?. Pero sí sobre el papel me gusta el embrague antirrebote. Aunque sí, la de cúpula tipo SS siempre me han gustado también

    Saludos

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