Toma de contacto Estampa clásica de moto con todo a la vista: no hay nada oculto ni nada extraño y por ello no pasa de moda. Chasis robusto, gran freno delantero, faro redondo y clásico y carrocería mínima. De hecho aún sigue a la venta con carenado integral, pero es la misma moto, con lo cual es una gran ventaja para obtener repuestos.

Manillar horroroso

Dos grandes relojes delante del manillar y testigos luminosos para lo básico es todo su equipamiento, pero no necesita nada más.

Hay dos tipos de modelos: las más antiguas que montan dos bonitos semimanillares y tija de bonita terminación, y las más modernas que montan un tubo como de bicicleta mala. Ni qué decir tiene que preferimos las primeras, aunque la conversión, por postura, posibilidad de convertir la horquilla en regulable y estética, es más que recomendable.

Semimanillares

En las nuevas, la postura es agarrando dos cuernos de vaca. La probada es la de semimanillares, con más control en la rueda delantera y postura más natural, sin ser inclinada, pero tampoco tan erguida.

En marcha Desde que nos montamos notamos la moto pequeña, ligera y bajita. Está claro q pocas cosas van tan bien en el tráfico urbano. Mejor aún que un maxi scooter porque es más pequeña y de mantenimiento mucho más barato, además de la seguridad que nos da un ciclo de moto de verdad en vías interurbanas o de circunvalación.

Sin complejos con motos más potentes

Pero además cuando salimos a carretera tenemos una moto que anda suficiente en un mundo cada vez más lleno de coches y limitaciones de velocidad. Sólo se quedará algo corta con pasajero y equipaje, y su falta de carenado hará de limitador “natural” de velocidad. Una cúpula hace mucho bien a la moto en este medio, e incluso se fabrican carenados integrales, que no recomiendo porque hacen que el motor se refrigere menos.

Motor por otra parte indestructible y que resiste las mayores perrerías. Contrariamente a una super RRRR usaremos toda la potencia en una carretera de curvas y nos lo pasaremos muy bien exprimiéndola, además porque sale de abajo sin titubeos y estira hasta la raya roja sin problemas y sin dudas, con potencia y salida plana y en la mano. La versión actual, con mucho más peso, anda bastante menos.

De todos modos, no perdamos de vista que las prestaciones de esta moto serían sobresalientes 30 años atrás. Hoy día no anda mucho, pero viajes a 140-160 km/h perfectamente al alcance de esta moto, recordemos que incluso están fuera de la ley.

Versión 92 con semimanillares y regulación de horquilla

Parte ciclo La horquilla es regulable en los modelos del año 1992 al 94. Y es necesario, porque es muy blanda. La conversión al resto de modelos se puede realizar muy fácilmente. Con esto y aceite más denso, y regulando a nuestro peso el sencillo pero eficaz amortiguador trasero, la moto va muy muy bien en carretera, y en curvas cerradas es muy divertida. Frena muy bien, a pesar de su ligereza no es inestable, por algo el chasis es un estupendo doble viga, entra sola y no se mueve, dando una gran confianza en su conducción. Perfecta para aprender.

Problemas Motor indestructible con un mínimo de mantenimiento. Por algo se vendió muchísimo entre mensajeros. No tiene problemas endémicos bien mantenida.

Eso sí, a partir del año 95 los acabados son muchísimo peores por toda la moto, con materiales más baratos y presentación peor. Sólo hay que comparar la presentación de los frenos  o la tija con los de las versiones anteriores, p.ej. 

Conocemos concretamente un modelo del año 1992 que en su día se le montó un Stage 3 de carburación (con el cual supera los 200 km/h) y hoy día sigue tal cual, más de veinte años después. La de mi hermano menor.

Cambios de aceite (mineral preferiblemente) cada 5.000 kms, reglaje de válvulas (sencillo), sincronización de carburadores, y con consumo de mechero tenemos moto para siempre.

Lo ya comentado de la horquilla es imprescindible para tener una moto completa, sólida, estable y que con el cambio propuesto no sólo mejorará muchos enteros, sino que en frenada mejorará tremendamente.

En conclusión: si quieres una moto segura, cómoda, económica, irrompible, para todo y sin problemas, cómprate una GS 500. Y una cúpula para los días de frío.